Crónica #eaglespeople
De machaca a machaca, es genial. Como decía el anuncio de Pirelli, LA POTENCIA SIN CONTROL NO SIRVE DE NADA.
Recordad que en los entrenamientos de calidad, particularmente las series resultan muy agresivas para todo el sistema locomotor. Cuando ejecutamos una destreza de velocidad, cada uno de nuestros tendones, músculos o articulaciones han de gestionar el esfuerzo en fracciones de segundo para mantener la trayectoria y, en suma, optimizar la zancada.
Nuestro cuerpo es un gran compensador, y tenderá a utilizar ( o más bien, sobreutilizar) las estructuras musculares que tengamos más desarrolladas en detrimento de aquellas otras que no usamos. Este desequilibrio, tarde o temprano degenera en LESIÓN, tal cual yo mismo he podido comprobar con mi dichosa fascia-lata (afortunadamente ya en orden). De ahí la importancia de «despertar», de activar la comunicación neuromuscular perdida y posteriormente potenciarla a través de un plan personalizado en función de las carencias de cada atleta. Sólo así garantizaremos el correcto reclutamiento de todas las unidades motoras que se ven implicadas en la biomecánica de carrera.
El trabajo de fuerza que habitualmente observamos en gimnasio, a través de sucesivas repeticiones con mancuernas y máquinas, generalmente NO suele corresponderse con nuestras necesidades de corredor, por lo que suele ser improductivo o hasta contraproducente.
Luis del Águila propone un modelo de trabajo más adecuado a nuestra actividad, que va mucho más allá de buscar la mejora en el rendimiento: salvaguardar nuestro organismo de potenciales lesiones y, en definitiva, disfrutar de nuestra pasión con seguridad. Tened en cuenta igualmente, que la mayoría de nosotros no somos chavales, y una lesión a nuestra edad conlleva estar en «dique seco» mucho más tiempo, dada la menor capacidad regenerativa de que disponemos.
Os animo a seguir su blog y, por supuesto, a asistir a sus seminarios.
Saludos, cracks.
Pronad, supinad, pero siempre, CORRED.
